La aplicación del IGV a los servicios digitales ha generado muchas perspectivas a favor y en contra. Mientras sus defensores aseguran que nivelará el terreno de juego entre las empresas peruanas y extranjeras no domiciliadas, sus detractores buscan anularla antes de su aplicación para evitar que se incrementen las tarifas.
Esta medida ha sido justificada por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) con el objetivo de ampliar la base tributaria y eliminar la competencia desigual que existe entre las compañías nacionales y los proveedores no domiciliados.
Sin embargo los grupos empresariales, especialistas y algunos congresistas han evidenciado su rechazo. Ellos argumentan que esta medida puede incrementar las tarifas que pagan los consumidores por utilizar, Netflix, Disney+, Airbnb entre otros, ya que la economía está saliendo de la recesión.